jueves, 17 de septiembre de 2009

Boca: demasiada presión

Por Adrián Pertoldi

El cuadro de situación de Boca en la corriente temporada dista de ser lo ideal. Consumada la eliminación ante Vélez por la Copa Sudamericana, justa por dónde se la mire, ya que el conjunto de Ricardo Gareca demostró en los 180 minutos un nivel futbolístico y físico ampliamente superior a lo mostrado por Riquelme y cía sólo quedará como objetivo en este segundo semestre el Torneo Apertura y una posible clasificación, lejana por cierto, a la Copa Libertadores 2010. En el torneo local, se encuentra a 7 puntos del líder Rosario Central y viene de perder de forma categórica ante Atlético Tucumán, partido que reflejó ante todo la escasa capacidad física de un equipo, que tras la gira exitosa por Europa en plena pretemporada, no soporta un ritmo constante de despliegue. Ayer fue más de lo mismo. Un correcto primer tiempo, en el que Boca mereció haberse puesto en ventaja, pero con el complemento en marcha el bajón físico se hizo presente y por ende las ideas para dañar el arco de Montoya desaparecieron. Allí Vélez, viejo zorro, que sabe perfecto lo que pretende, aprovechó las diferentes desavenencias en el fondo visitante, asunto por demás repetido en esta segunda era de Basile, y así pudo liquidar el pleito.

En términos tácticos, Boca asumió desde el partido con Argentinos una filosofía marcada de reunir volantes de buen pie (Riquelme, Insúa y Guillermo Marino) con el propósito de abastecer a Mouche y Palermo, sosteniendo la idea de que este modo Boca ganaría mayor volumen de juego y profundidad en el arco rival. Los resultados no fueron los esperados. Tampoco las apariciones del prometedor Nicolás Gaitán, pensando más en la jugada individual perfecta que en el devenir general del conjunto, sirvieron de alicientes para un preocupado Basile, quien dibuja en su mente la forma de encarrilar a un grupo de futbolistas, que hoy por hoy, no encuentran el camino. Chau Sudamericana, lejos Apertura y la clasificación a la Libertadores casi como una utopía. Inesperado en tan poco tiempo.

viernes, 11 de septiembre de 2009

¿Y esto?

Por Adrián Pertoldi

La noticia no tiene vueltas: Independiente vendió porcentajes de los mejores 4 valores que tiene en la cantera por la irrisoria, por lo bajo, claro está, de 2.800.000 dólares. De este modo se cederá el 40% de Sergio Vittor, 40% de Federico Mancuello, 20% de Lucas Kruspky (todavía no debutó en Primera) y la mejor aparición en Independiente después de Sergio Agüero, nos referimos a Patricio Rodríguez, al que increíblemente se transfirió el 30% de su pase. El grupo inversor, de nombre Emeibe, aportará esta suma de dinero en forma inmediata. Con este llegada fresca de capitales, Independiente tendría asegurada las reformas para la finalización de su estadio. Según afirma el portal Cancha Llena, la operación se aprobará en Comisión Directiva, pese a algunos desacuerdos internos en el oficialismo. La misma la habría acercado Oscar Vázquez, vocal y miembro del departamento de fútbol profesional.

La política de Julio Comparada debe ser analizada como un proceso continuo de vaciamiento en términos futbolísticos e institucionales, en el que llegan por millones de dólares con sólo verlos por algún DVD (caso José Moreno) y varios con nivel dudoso para vestir la camiseta de Independiente, lo que ha traído aparejado campañas pésimas y el fantasma de la Promoción revoloteando. Sin embargo, ante la primera oferta, se decide despilfarrar un capital de origen propio y en próxima explosión por menos de 3 millones de dólares. Repito el concepto, se está regalando lo mejor del futuro del club sin medir las consecuencias. Patito Rodríguez reúne los requisitos para transformarse en un futbolista de nivel europeo, en el que Independiente podría reembolsar una cifra millonaria. Con un puñado de partidos, ya le bajaron el martillo...

En pos de inaugurar el estadio nuevo, aquella maqueta que lucía orgulloso Comparada en 2005, Independiente ha vendido valores de su plantel profesional en más de 50 millones de dólares. Ha recibido aportes recientes de la Municipalidad de Avellaneda y la secretaría de Obras Públicas de La Nación. Sin embargo, la culminación del mismo sigue en veremos. El hincha en el medio. Y el club perdiendo patrimonio. Inentendible.