Esta novedad afecta particularmente a los tres futbolistas anteriormente mencionados ya que son los únicos que restan renovar. Algunos allegados a Palermo, máximo goleador histórico del club, marcan que el delantero quiere que se respete su gran trayectoria vistiendo esos colores y no sufrir un brusco reajuste. Hasta algunos más arriesgados admiten que si se llega a cumplir esta reducción podría marcharse a otra institución.
sábado, 28 de marzo de 2009
Abrochándose...
Esta novedad afecta particularmente a los tres futbolistas anteriormente mencionados ya que son los únicos que restan renovar. Algunos allegados a Palermo, máximo goleador histórico del club, marcan que el delantero quiere que se respete su gran trayectoria vistiendo esos colores y no sufrir un brusco reajuste. Hasta algunos más arriesgados admiten que si se llega a cumplir esta reducción podría marcharse a otra institución.
martes, 24 de marzo de 2009
¿Y DONDE ESTA EL PILOTO?
domingo, 22 de marzo de 2009
"Jugadores que dirigen a los técnicos"
"Miguel Ángel Santoro no renunció al puesto de entrenador de Independiente por culpa de los resultados. Pepé se alejó porque sus dirigidos ya no le respondían. “Cuando la batalla es desleal, es mejor irse”, dijo. Su despedida de los jugadores, con el lacónico “sé que no me quieren”, fue elocuente.
¿Qué pasa? ¿Los jugadores de Independiente son camarilleros? Se trata de un fenómeno común: hoy, los que mandan son los futbolistas, no los técnicos. Bastaría con preguntarle a Alfio Basile, quien debió dejar la Selección porque Lionel Messi, el Kun Agüero y compañía ya no lo querían. O a Leo Astrada (Estudiantes), Juan Manuel Llop (Racing) y Gustavo Alfaro (Central), por nombrar sólo la lista más fresca de entrenadores que perdieron su trabajo por acción u omisión de sus dirigidos.
Y, en esto, sí tienen la culpa los resultados. O, mejor, los resultadistas. Porque los técnicos, y sus proyectos, se han vuelto tan descartables que los jugadores ya no los valoran. ¿Alguien puede sentirse consustanciado con la causa de un DT que tal vez dure cinco partidos? ¿No es lógico que el futbolista desprecie un rol al que no respetan los dirigentes ni los propios técnicos, que sobrevuelan como buitres los clubes de los colegas que penden de un hilo? Sí, es lógico. Lo que habría que cambiar es la lógica entera: ni dictadura del resultado, ni entrenadores descartables, ni futbolistas caprichosos. Que jugar en equipo incluye, también, ponerse la camiseta del DT".
martes, 17 de marzo de 2009
Yo soy el culpable
Llegamos media hora antes y dimos toda la vuelta al Cilindro para ingresar por el lugar indicado. En el primer cacheo, sentí que había matado a cuatro personas unos minutos antes. Los policías me miraban como si yo hubiese sido el Petiso Orejudo o algún criminal de esa calaña. En sus rostros se dibujaba una rudeza absurda a punto de estallar. Finalmente y con algunos empujones pasé el primer control. Dos pasos más adelante, un grupo circular de seis personas se pasaban un papelito con cocaína como si fuera un mate y tomaban cerveza de una botella recortada. Pero…cómo puede ser? Hace un instante me habían hecho el “cacheo” y estos tipos tomaban droga y alcohol a dos metros (distancia real) de la Policía. Algo está fallando.
Unos doscientos metros más adelante un nuevo cacheo. Mi mujer por la fila de las mujeres y yo por la de los animales…digo de los hombres. “Nena la botella no pasa” increpó una mujer policía. Mi mujer, que no es mucho de ir a la cancha, mucho no entendía. Unos metros atrás había un grupo de personas tomando cerveza y cocaína y ella no podía entrar con agua…algo está mal.
Luego de haber comprado las entradas, nos disponemos al tercer manoseo policial. Realmente los rostros carecientes de amabilidad de los uniformados daban temor. La inexplicable sensación de ingresar al estadio se contraponía con el temor de que en cualquier mal movimiento, uno de estos policías pudiera reaccionar mal y por ir a la cancha a ver un partido de fútbol, volvés con un bastonazo.
Redundar en detalles de cómo te tratan antes de ingresas me parece ilógico entendiendo que todos los que leen esta nota son seguidores de este hermoso deporte y sufren lo mismo que cualquier gil como yo al ingreso a un estadio.
Ya ubicados en la platea alta detrás del arco, observé (como en todas las canchas) que los policías estás del lado de adentro del campo. Alguien me explica que función cumplen allí? A los dos minutos del partido, un señor pasado en kilos no tuvo mejor idea que pararse en el borde de la pared de hormigón que delimita el fin de esa platea alta. Se quedó allí el resto del primer tiempo y gran parte del segundo mientras, de vez en cuando, aspiraba un polvito que conseguía al abrir un papelito que tenía en el bolsillo. Realmente mi inquietud no pasaba por intentar curar a aquel hombre sino porque si se caía de allí arriba, mataba por lo menos a alguno de la popular de abajo.
Y la policía? Adentro del campo de juego. Nadie en mas de 80 minutos fue a prevenir lo que pudo haber sido algo 100% prevenible. Les aseguro que el sector en el que me encontraba estaba más atento a este hombre que al partido.
Entonces…resumiendo. Fui a la cancha, estuve a punto de ser un asesino en tres cacheos, me distraje viendo a un hombre haciendo equilibrio con su vida mientras tomaba cocaína y encima pagué $ 50 por entrada…Yo soy el culpable. La próxima me quedo en casa y lo veo por tele.
domingo, 15 de marzo de 2009
Buscando futuro
jueves, 12 de marzo de 2009
Los elegidos de Doble 5
martes, 10 de marzo de 2009
¿Quién manda?
Hace algunas semanas el diario Clarín publicó una nota sobre el derecho de admisión en los estadios. Suena raro en el comienzo de 2009 seguir escuchando más de lo mismo.
Es tan difícil decirle que NO a las barras? Este sistema de “derecho de admisión” lo único que puede llegar a hacer es dilatar aún más alguna decisión lógica acerca de cómo combatir la Violencia en el Fútbol.
Cómo es posible que sin ir a todas las canchas todos sepamos quiénes son los dueños de nuestros destinos los fines de semana y los mismos dirigentes siguen gastando millones en seguridad cuando la solución es tan simple como clara: “Vos, aquel y este grupo, no entran más!”
Quién va a ser el Súper-héroe que combata el mal para que los hinchas verdaderos podamos ir a la cancha en familia? Será negocio seguir manteniendo las barras o nadie se animará a hacer nada por una posible represalia?
No entiendo. Sigo sin entender cómo muchos clubes seden ganancias de estacionamientos, merchandising, kioscos y algunos otros negocios a los barras.
Es tan simple y tan sencillo decir quién ingresa o quién no ingresa a un club que tampoco entiendo por qué hay que invertir tanto dinero o firmar tantos decretos.