sábado, 28 de marzo de 2009

Abrochándose...

Llegan épocas de ajustarse los cinturones. Se confirmó la idea de la dirigencia de Boca de “pesificar” los contratos de todos los integrantes del plantel y por ende se establecerá un dólar fijo para aquellos convenios que se establezcan entre las dos partes. Es de amplio conocimiento las diferentes vicisitudes que está viviendo el equipo xeneize en su faz económica, donde soportar los gastos en varios de los referentes históricos (Palermo, Ibarra y Vargas, por citar algunos casos) han hecho mella en las cuentas de la institución, que se ve necesitada de aportar dinero fresco con algunas ventas al exterior, como pasó recientemente con Jesús Dátolo y su pase al Nápoli de Italia.

Esta novedad afecta particularmente a los tres futbolistas anteriormente mencionados ya que son los únicos que restan renovar. Algunos allegados a Palermo, máximo goleador histórico del club, marcan que el delantero quiere que se respete su gran trayectoria vistiendo esos colores y no sufrir un brusco reajuste. Hasta algunos más arriesgados admiten que si se llega a cumplir esta reducción podría marcharse a otra institución.

Por el lado de Ibarra y Vargas, la dirigencia está segura de que se podrán finiquitar sus nuevos contratos a partir de la flamante reforma impulsada por el presidente Jorge Ameal. Otros dirigentes apuntaron su vista en el millonario convenio de Rodrigo Palacio y en consecuencia ya se rumorea en los pasillos de la Bombonera que cuando llegue una oferta suculenta de Europa, el bahiense hará sus valijas. El caso de Juan Román Riquelme tiene ribetes diferentes. En estos momentos sus honorarios son abonados por el Villarreal y en el próximo tiempo, según propias palabras del protagonista, a partir de junio de 2009, jugaría gratis en Boca.

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